Los diseñadores de coches… también piensan en nosotras.
Os presentamos el nuevo Ford focus, el primer vehículo diseñado para las embarazadas. ¿Quién dice que conducir durante el embarazo es una tarea fácil? Las dificultades a las que se exponen las embarazadas a la hora de conducir son muchas y, Clemens Marek, supervisor del equipo de ergonomía de Ford en el Centro Técnico de Mekenich (Alemania) se ha puesto en la piel de ellas, literalmente.
Para ello se recurrió al traje de embarazo que se utiliza para realizar las pruebas del vehículo y que consta de dos lastres de 2 kilos que simulan el peso de un bebé, una bolsa que hace el efecto de una vejiga (que contiene 2 litros de agua), un cojín justo encima de la vejiga para simular la cabeza del bebé y una faja alrededor de los pulmones que dificulta la respiración.
Tras la prueba con este traje se vio que las mayores dificultades antes las que se enfrentaban las embarazadas en la conducción eran el movimiento del cuerpo a la hora de entrar o salir del coche, los cambios de postura y las limitaciones en el alcance de objetos.
Los resultados se han traducido en una mejora en el diseño del vehículo consistente en una mayor elevación de la posición del asiento para facilitar la entrada y salida del coche; el acercamiento del dispositivo de apertura de la guantera para alcanzar mejor desde el asiendo del conductor; el volante se regula en profundidad según la barriga de la embarazada y se ha modificado la curvatura de los asientos para un mejor apoye de la espalda.
Desde 2010, los manuales de clientes de los coches Ford en Europa han incluido una explicación e ilustración gráfica sobre cómo las embarazadas deben ponerse el cinturón. Siempre el respaldo del asiento debe estar en posición vertical y la parte inferior del cinturón debe ir colocada abajo cruzando las caderas y apretado de manera que resulte cómodo. El cinturón del hombro se tiene que colocar de modo que cruce la mitad del hombre y la mitad del pecho.